201512.14
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Administración Pública y Redes Sociales

Las redes sociales son un fenómeno que ha venido para quedarse. Son millones de personas las que acceden a ellas a diario para comunicarse y compartir. Es tal su éxito y su potencial de comunicación que las empresas, organismos e instituciones también han entrado de lleno en las redes sociales. La Administración Pública no es diferente.

Los organismos pertenecientes a la Administración Pública necesitan la presencia digital que les da las redes sociales por múltiples motivos: acercarse al ciudadano, acercar al ciudadano a la administración, desarrollar la administración digital o poner en práctica normativas como la Ley de Transparencia, entre otros. Por ello, podemos encontrar multitud de organismos pertenecientes a la Administración Pública en redes sociales, como ayuntamientos o empresas públicas.

Estos organismos, sin embargo, no pueden crear su presencia digital en redes sociales sin más. Para que la presencia digital en redes sociales de un organismo perteneciente a la Administración Pública tenga validez jurídica y represente a la organización en sí, debe validarse mediante una disposición tomada en Junta de Gobierno, o en Pleno, que habilite a crear la presencia digital. Asimismo, debe constar qué persona u empresa gestionará dicha presencia digital en las redes sociales. En caso de tratarse de una empresa privada se requerirá de un contrato o licitación.

Por otro lado, las indudables ventajas que la presencia digital en las redes sociales trae a la Administración Pública puede suponer también un problema que ya se daba con las personas físicas: la suplantación de personalidad. Hace poco, por ejemplo, se ha dado el caso del Colegio Baudem de Madrid, donde una profesora del centro descubrió que en Instagram aparecía una cuenta supuestamente oficial de ese colegio, con más de cien seguidores entre alumnos y padres, cuando el colegio no había creado cuenta alguna. Las posibles consecuencias de estafas, robo de datos personales o, en este caso particular, pederastia, eran inmensas. Esta situación puede extrapolarse a cualquier organismo perteneciente a la Administración Pública con presencia digital en redes sociales.


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